lunes, 5 de octubre de 2015

ALEGATO DE UN SOÑADOR


Personas, historias que se entrelazan en una red neural que conforma nuestra existencia, desconociendo en qué punto de la misma nos encontramos, donde cada instante puede ser un nuevo principio.

Me llaman Aaron, pero eso no es más que un nombre, soy un soñador que dibuja a través de sus sueños un mundo que ansía que sea mejor. Es mi forma de entender este mundo, mi pequeño gran universo. Cada cosa que hecho en esta vida la he realizado desde el fondo de mi alma, con todo mi ser, con pasión, con obsesión por el detalle, en definitiva con Amor.

Pero no voy a hablar de mi, ya que no soy más que un ser viviente que vive cada día intentando descubrir qué es todo aquello que le rodea, no soy más que el recolector de aquello que cada día nos depara. Voy a hablar de aquello con lo que he iniciado mi alegato: las personas que aparecen en mi vida con las que entrelazamos nuestra alma.

Todos y cada uno de vosotros sois especiales, sois seres de pasión, amor, de ilusión, con las mismas incógnitas por resolver que yo. Todos y cada uno de vosotros aportais a mi universo un poco de sentido a mi existencia, sólo os puedo agradecer formar parte de ella y aportar vuestra alegría, ira, miedo, defectos y virtudes, seguid siendo así, yo seguiré ahí, para siempre, porque la amistad es aquel contrato que traspasa los límites que tanto el tiempo y el espacio nos puede interponer. Ya se puede estar en contacto diario o separados por océanos, que la red neural ya es imposible de separar.

Todos y cada uno de nosotros tenemos el poder convertir cada momento en especial. Desconozco cómo amanecerá mañana o siquiera si va existir un mañana por lo que deseo daros las gracias por estar ahí de abrirme la puerta de vuestra alma, habeis dejado entrar un humilde soñador.

Cuando vuestros sueños se apaguen recordad quién soy y que estoy a vuestro lado, estéis donde estéis.


Dedicado a vosotros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario